Para la Escuela de Dietética y Nutrición del ISSSTE y para la editora, Mtra. Luz Elena Pale Montero, directora de esta institución educativa, la presente reedición revisada de la obra del Dr. José Quintín Olascoaga Moncada (q.e.p.d.) Historia de la Nutriología significa, además del recobro de un documento mimeografiado, un rescate histórico que llevará al lector por un apasionante viaje retrospectivo en el devenir de la Nutriología y Alimentación en México.

Conocerá las bases científicas y técnicas de la Nutrición. Asimismo, modos y costumbres de la alimentación en nuestro país y cómo se fueron desarrollando planes y programas alimentarios gubernamentales.

Todo ello expuesto magistralmente en la voz escrita del pionero de nuestra disciplina en México, Dr. José Quintín Olascoaga.

Con el propósito de preservar y traer del pasado a la época actual los aportes mimeografiados del Dr. Olascoaga, se ha respetado íntegramente en este impreso la forma original en que la obra está expuesta; de ahí que este libro no solo es de indiscutible valor histórico y académico, sino también un documento de consulta obligada para el que desee entender la historia de la Nutriología en México.

Al final de la obra, la editora, Mtra. Pale, agrega un epílogo donde se aportan datos biográficos del autor para entender su contexto histórico y personal; seguido a ello una cronología que da cuenta esquemática de la situación actual de la profesión en México, permitiendo vislumbrar el amplio campo de actividad profesional para el perfil de sus licenciados en Nutrición.

Por último, y a nombre de todos los que han participado en esta primera reedición, y con plena certidumbre de que su autor, en dondequiera que esté, comparte con nosotros la satisfacción de invitarlo con entusiasmo a leer y estudiar la obra que hoy tiene en sus manos.

Estamos ciertos que el viaje por estas páginas será una de muchas razones para motivar al licenciado en Nutrición de hoy en día a hacer de la ciencia de la Nutrición una noble tarea al servicio de una humanidad bien alimentada; y cuanto más, en el crítico contexto sociopolítico y económico actual en el que se demandan nutriólogos con una alta conciencia de servicio social. Como bien dejara un mensaje el Dr. Quintín Olascoaga: ”que tomen su profesión con mucha responsabilidad. Si se dedican a esto que sea para servir y no para servirse. Ese es el principio básico”.